martes, 23 de abril de 2013

La France ... (I).


   (Montrejeau, Condom, Agen, Bordeaux, Lacanau, Royan, Rochefort, La Rochelle:702km. Acumulado 1.160 km.)

   Francia se va mostrando, y revelando cuan variada es. El Pirineo da paso a La Campiña, tierra fértil y generosa en agua. La huerta del país. La granja familiar es una constante. Pueblos donde la vida late despacio y las carreteras son un sueño para rodar.

   La atravesamos con rumbo norte para unirnos en Agen al Canal del Garona. Días después vendría Burdeos, donde nuestra "Warm" Nicole (junto a Jean Francois), nos mostró el casco antiguo, revelándonos algunos de sus secretos.
   Y como estamos en un país donde la bicicleta es una reina, una "Piste Cyclable", nos coloca en el Atlántico sin tener que lidiar con el tráfico rodado. Una vez en el litoral, tomamos LaVelodysee que de momento nos ha conducido hasta la casa de Loit y Thierry, nuestros "Warms" en La Rochelle, desde donde escribo esta actualización, y en la que pondré al día el mantenimiento de las bicis, nuestras convidadas de piedra.
   La meteo, se ha ido portando. Los rigores de Pirineos han quedado atrás. Muchos días rodamos en pantalón corto, aunque las noches siguen siendo frescas. Algún rato de lluvia aquí y allá que vamos sorteando, y algunos ratos de viento que por momentos ha sido duro. Y es que el terreno por aquí es bastante llano, y cuando le da por soplar, hay que agarrarse!

   Y mientras tanto, pasa la vida, y hace ya un mes que salimos, y hemos rodado ya los primeros 1.100 km. Y si bien alguna rodilla se ha quejado un poquito, hemos ido adaptando las bicis a nuestros cuerpos, y donde no hemos podido, nuestros cuerpos a la bicis, y así adquiriendo un equilibrio.
  
   Dejo unas fotos, que cuentan mejor que yo lo que hemos vivido.



1/2: Con Pascal y sus ovejas, el papá de nuestra "WarmFamilia" en Labarthe-Riviére.

2/2: ... y ayudamos en el vallado.

El primero en la frente!.



1/2: Y si hacemos noche aquí? ...

2/2: ... y menos mal que lo encontramos, porque se pasó toda la noche lloviendo.



Pirineos va quedando atrás.

Ferme de canards (Granja de patos).

Aline y Jean Louis nos hicieron un huequito en el almacén de su granja ...

... y nos obsequiaron con esta lechuga y café recién hecho a la mañana siguiente.

Carreteras de ensueño ...

Sexo seguro con mi negra ;)

Coquetería francesa.

Y llegamos a la Garonne!





Distintos usos.

Primavera en las alforjas.

A tiro de piedra del Canal hay multitud de pueblecitos que visitar y donde avituallarse.

René. Viajero holandés con el que compartimos noche. Quizás nos veamos en Centroamérica el próximo año.





Burdeos tiene la calle peatonal más larga de Europa.

Iglesia de St.Michel, con el Campanario construido por separado.

Pont du Pierre, sobre el Garonne.

Cena española en casa de nuestros "Warms" Nicole y Jean Francois.

Costa Atlántica.

Velodysee.
Desayunamos?.

Velodysee.

La Velodysee, salva el estuario de la Gironde con un transbordador.


El Faro de Cordouan, señaliza el Estuario de La Gironde, a 7 kms. de tierra firme.

Francia está plagada de Monumentos en donde se recuerdan a los caídos en ambas Guerras Mundiales. 


Marismas en Rochefort.

Bocata del mediodía.



La Rochelle. Ciudad Marítima fortificada.

jueves, 18 de abril de 2013

Pirineos ...

(Jaca, Aínsa, Castejón de Sos, Vilaller, Viella: 227 km.)
  

   El primer hito importante de este viaje.



   La meteo, caprichosa, juega con nosotros como el viento con una veleta. Una vez más tuvimos de todo aunque de lo bueno más bien poco. Pedaleamos con un ojo puesto en el cielo, intentando descifrar la evolución de las nubes, y nos salió bien. Para cuando descargaba, nos pilló siempre bajo techo, ya fuera en una ermita o en nuestra tienda.


   Mención especial merece la tarde que llegamos a Castejón de Sos, donde un cielo con el aspecto de "la boca de un lobo", nos dió 10 escasos minutos para montar la tienda, y poner todo bajo ella. Es en momentos como este donde la sincronización del equipo es decisiva.
   Y mientras salibábamos salteando unas longanizas de Graus, con un fondo de cebollas, ajo, calabacín y tomate, afuera, en las siguientes 2 horas la nieve fue alternando con el granizo, distinguiendolos por el repiqueteo en nuestro humilde techo.
   Ya metidos en los sacos, una noche estrellada de la mano de una helada de esas en la que crujen los huesos, veló nuestros sueños. Pero nada que el aroma a café y tostadas recién hechas a la mañana siguiente, no curase.

   El resto fue un continuo subir y bajar puertos, con algunas rampas duras, aprovechando los ratitos de sol para parar y deleitarnos. Y los de ventisca para mantener el calor pedalendo, que era como mejor se estaba.




Río Ara.


Congosto de Ventamillo.

Rampas duras.

Collado de Foradada.



  


   El paso elegido para pasar al país vecino fue el Valle de Arán. Atravesamos el túnel de Viella de casi 6 km, de manera rápida y frugaz, como si de un amor de una noche se tratara, porque el frío en el interior era "pa´cagarse".
   Y en esas estamos, bucando un lugar donde plantar la tienda ...